RECOPILANDO XVII

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Duendes que dejan llaves de corazones que hadas no desean y caen en el olvido...

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No hay hombre más sabio que aquel que al regreso de sus tinieblas pone en práctica lo aprendido de sus errores.

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Volutas de cuerpo y humo expresando los sublimes deseos de sueños perdidos entre las sabanas en noches de soledad...

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Soy libre, mi voluntad está en mi mente y nadie salvo yo puede actuar sobre ella.

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Buscaba un motivo para reírse cuando vio su reflejo en la barra de aquel bar.

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La forma en la que se desprendió del camisón le dio a entender que estaba ávida de caricias, aquellas que llevaba esperando tanto tiempo...

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Un sueño no es en sí más que la sombra de nuestros anhelos...

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Era sólo una sombra en sus ojos, un rumor en sus oídos, un olor en su nariz o un escalofrío al rozarse...

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Lo más ridículo que hay es una acerada seguridad en los movimientos que más tarde no se van a corresponder con tus palabras.

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Le entraron ganas de fulminarla con la mirada, pero estaba demasiado solo y tenía demasiado miedo a perderla...

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Ser la áspid que te guarde la espalda para vivir en ella eternamente...

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Bastaba con acudir a la cita, 

con abrir aquella puerta. 

¿Quién no puede abrir una puerta cuando basta con empujar?..

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Entró en aquella tienda con el propósito de comenzar de nuevo, pero se habían acabado las almas de repuesto...

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Alquilaron una habitación y se entregaron no al amor, sino al cariño...

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Habitualmente el que habla mucho piensa que tiene más derechos y razones que aquel que le escucha.

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La observó caminar y se desataron en él unos engranajes ocultos y extremos...

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Pasearon bajo la lluvia, sin paraguas, saboreando en cada gota que tiempo que les restaba juntos.

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Dónde está la vida

que se ausenta cruel,

dónde las fuerzas

que abandonan mi ser,

dónde el final del camino

de mi lucha sin cuartel...

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Aquella noche se dieron cariño hasta quedarse vacíos de amor...

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Estaba dispuesto a morir en aquel tercio, pues jamás nadie lidió en él faena más extensa...

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"No culpes a la gente por decepcionarte, acepta que es tu culpa al esperar demasiado de ellos."

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Aquel silencio hirió su viejo corazón, pero las heridas sanan pronto cuando se ha luchado en mil batallas.

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Existe la capacidad de reconocer los sentimientos por el tacto...

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Visitó con ella el séptimo cielo, pero cuando lo abandonó, la caída desde allí fue insalvable...

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No me importa que envejezca mi cuerpo, pero no soporto que lo haga mi alma...

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Si sucumbo a la tentación de mirarla, me penetra y estoy acabado, vencido...

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Siembras de sueños 

mi almohada cada noche 

y al despuntar el día, 

muero un poco en silencio 

pues mi cama está vacía....

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Qué es la vida 

sino caminar juntos, 

qué es el amor 

sino la propia vida....

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